domingo, 26 de abril de 2015

SI... TODAVÍA TENEMOS FUTURO

    Dicen que los que nos gusta esto de la darle a la letra, precisamos de un agente externo que nos estimule a arrancarnos, y ponernos a escribir.

Es cierto; al menos en mi caso. Yo necesito que un concepto, una noticia..., una foto, estimulen mis neuronas de escritor.

Es el caso de lo que me ocurrió esta mañana... Una foto, que me enviaron por wasap de unos niños que conozco muy bien... Dos primos compartiendo los momentos previos de ver a su equipo jugar un partido de futbol.

Vistiendo los colores de su Málaga natal miraban a la cámara abrazados..., sonrientes..., orgullosos de aquellos colores que vestían y hacían suyos.

Visionar esa foto me supo mucho más que a eso; que contemplar  la imagen de dos chavales que acuden a ver jugar a su equipo... Me dejó el dulce sabor de un futuro mejor; ese sabor que últimamente, no siempre estuve seguro de poder volver a alojar en mi paladar, y que tan grato se me hace.

Sí..., hay futuro..., seguro que lo hay; un hermoso futuro por delante.

No hay más que ver a esos niños para ver que todo mejorará. Que ellos y tantos otros como ellos, sabrán darle vueltas a este País, tantas como sean necesarias, para convertir, únicamente en triste pasado, lo que ahora estamos viviendo.

Ellos solo son dos briznas de hierba fresca..., dos brotes verdes en medio del erial en que hemos convertido nuestra tierra…, desaprovechando nuestro tiempo. Escondidos por el miedo al recuerdo del pasado.

Nunca debimos conformarnos con el presente, justificando que el pasado fue peor.

Pero esa foto me llenó de optimismo. Ellos están ahí... Y como ellos, otros muchos, a los que sus padres; hombres y mujeres de bien, terminarán de forjar, ayudados por lo aprendido; enseñándoles a no huir nunca de nada. Para que le den un nuevo rumbo al mañana, y borren de un plumazo ese hoy que tanto nos preocupa.

Es por ello, que vosotros, mi pareja preferida de hinchas del Málaga, me habéis alegrado la mañana.

No olvidéis nunca los nexos que os unen... Ni olvidéis esa foto, y lo que sentíais cuando os la tomaron... Porque tenéis en vuestras manos lo más valioso que un hombre puede tener... EL FUTURO.